Páginas 648
Idioma Español
Publicación 2016
Editorial Tusquets
Me resisto a leer libros en torno a temas muy vistos, oídos,
leídos o convividos: franquismo, Guerra Civil, ETA, IRA, transición… Y más
actual: burbuja inmobiliaria, crisis bancaria, corrupción… ¿Me van a decir algo
que no sepa? Puede. Algún detalle; pero el ochenta por ciento me sonará. ¿Y el
de ETA? Bueno, si con 40 años de saturación informativa no tengo bastante…
¿Y que pasa con Patria? Pues que con tanto elogio de la
crítica, al final, la he leído. Sí, y me ha gustado ¿Pasa algo? ¿Que qué me
cuenta de nuevo? Nada; pero la gracia está en el tono y la amplitud del
panorama humano que retrata. Y mucha gracia es la que hace falta para hacerme
engullir 650 páginas en torno a un tema que me sé.
Vamos por partes. La historia. Un pueblo innombrado cerca de
San Sebastian. Dos familias amigas desde siempre, la de la víctima: el Txato,
propietario de una pequeña empresa de transportes, Bittori, su mujer y tres
hijos. Y la del verdugo: Joxian, obrero metalúrgico, Miren, su enérgica mujer
empapada de consignas abertzales y otros tres hijos. Llegan las cartas
exigiendo el impuesto revolucionario; las calles se llenan de pintadas
amenazantes, la gente del pueblo hace el vacío a la familia señalada; se les
niega el saludo, cambian de acera, en los corros se hace el silencio a su paso,
atendidos con desgana en las tiendas. El consejo de los menos hostiles: que se
vayan del pueblo.
Por la página 200 ejecutan al Txato y uno se pregunta si la
cosa dará para las 450 que quedan. Y sí, lo da. Aramburu sigue desgranando, con
humor y calidez, las vidas de sus personajes de uno y otro bando, vidas que
quedan afectadas y torcidas por el asesinato; pero a las que suceden muchas cosas más.
¿Y qué tiene de especial la novela? Pues el tono y los recursos narrativos empleados.
Son particulares; y de no ser por ellos, que le dan el frescor, soltura y
desenfado que requieren los tiempos, tendríamos una obra más en la veterana
tradición, naturalista o costumbrista, de la Pardo Bazán y Pereda.
Tenemos al narrador:
se diluye, funde y confunde con los personajes; entra y sale sus cabezas
como Pedro por su casa con naturalidad, sin que se note. Un ejemplo de tercera persona, onomatopeya y primera persona en una frase corta:
“Los
tacones eran para despertarle el apetito a Quique, no precisamente el que se
sacia comiendo. Toc, toc, toc, los había oído un rato antes puntear
sobre el parqué. A ver si va a llenármelo de agujeros.”
La estructura narrativa es un puzzle donde el autor va encajando escenas traídas de saltos de
tiempo y lugar. Va y viene de aquí a allá, del antes y el después. Una
escena lleva a otra sin desconcierto del lector.
El lenguaje coloquial, engañosamente fácil, con
diálogos que a menudo se integran en la descripción, hacen un relato dinámico y
vivaz. Y el humor, siempre ahí, refrescando el ambiente; te lo puedes encontrar
al volver la esquina de cada frase:
“Y el cura
se calentó y dale y venga y la paz. Le salió, cosa rara en él, que tiraba a
escueto y aplomado, un encendido sermón de veinte minutos.”
Un recurso muy utilizado: narrador y personajes interactúan
con preguntas y respuestas que aportan ligereza, como en una charla de taberna
(1):
“Días
después, ¿quién le habla del asunto del premio literario a Gorka? Nadie.
Tampoco su madre, al llegar él a casa, le venía con la lista diaria de
felicitadores.”
Los personajes secundarios, caracterizados con
una salva de tres tiros:
“Ella le
había ocultado un incidente en la zapatería. ¿Qué incidente? Pues que la dueña,
que es más seca que un polvorón, le había echado en cara que no hubiera
esperado más tiempo a quedarse embarazada.”
El conflicto vasco tratado con humor y calidez,
sin obviar el dramatismo que lo impregna. Una novela costumbrista, de banda
ancha y adaptada a los tiempos que corren: por arduo que sea el tema, te lo leerán,
siempre que entre fácil.
NOTAS
(1) Del magistral “Tristram Shandy” (1795) de
Laurence Sterne todavía puede aprenderse mucho en lo que se refiere a maneras
de interactuar narrador-lector-personajes.
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