Traductor M. Ángel
Páginas 522
Idioma Español
Publicación 1968 (1970)
Editorial Ayuso
Detenido en 1951 y acusado de trotskista y espía occidental
relacionado con Noel Field ( ver El fin de la inocencia ) fue juzgado y
condenado a cadena perpetua en los procesos de Praga montado por el
presidente estalinista Klement Gottwalt que murió de sifilis y
alcoholismo en 1953. Entre los inculpados estaban Otto Kratz que aparece
en el libro como André Simone, Vladimir Clementis ( El libro de la risa
y el olvido de Kundera ), Rudolf Margolius ( Bajo una estrella cruel de Heda Margolius ). Narra los meses de tortura ( la principal el
impedirle dormir ), la mecánica de los interrogatorios de pie durante 2 y
3 días en los que los "referent" se turnaban acosándolo con medias
verdades y falsedades para inculparlo.Cómo van construyendo el edificio
imponente de la acusación y London, después de meses de sufrimiento, se
riende a las exigencias del Partido hasta que le dictan las
declaraciones que debe aprenderse de memoria.Tanto él cmo su mujer Liz
eran auténticos comunistas que creían ciegamente en el Partido. Muy
reveladoras las cartas que Liz dirigía a los líderes en demanda de
explicaciones.Alterna la narración del día a día de los interrogatorios
con el relato de su biografia ( Guerra Civil, la resistencia en Francia,
cauteverio en Mauthausen ) y, en retrospectiva, los sentimientos y
gestiones de su mujer.Se acerca el juicio y recuerda los procesos de
Moscú, cómo los pocos que se revelaron tuvieron que retractarse. La
telaraña era avasalladora y no había manera de librarse. Es un relato
minucioso, terrible, kafkiano, de un proceso manipulado y teatralizado.
Le advertían que si no se atenía al guión cortarían su declaración y
sacarían un montón de testimonios que lo condenarían. Con la muerte de
Stalin, la caida de Beria y la rehabilitación de Noel Field en Hungria,
se inicia la propia de London que el cuenta en el epílogo junto con una
análisis político de los hechos. Documento minucioso, terrible y
kafkiano imprescindible para entender la historia del siglo XX. Nada que
envidiar, en cuanto a tensión narrativa, a las mejores novelas de
espionaje. Un 10.
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